Hola Jorge Humberto, es un placer volver a saludar a tu finísimo público. Hoy comentaré el estado de la recaudación fiscal y una opción de reforma en esta materia. En este tenor, les tengo dos noticias: una buena y una mala.
A. La buena, es que en los últimos 8 años los ingresos del gobierno obtenidos por impuestos se han incrementado.
B. La mala, es que los ingresos tributarios como proporción del PIB es una de las más bajas del mundo.
El gobierno obtiene ingresos por múltiples vías, acostumbramos separarlas en ingresos tributarios y no tributarios. En los primeros, el gobierno obtiene recursos a través de los impuestos, principalmente el impuesto sobre la renta y el impuesto al valor agregado.
Hoy en día, los ingresos tributarios respecto al producto interno bruto solo representan 9 de cada 100 pesos, lo cual no parecería poco, a menos que lo comparemos con otros casos en el mundo, por ejemplo, Argentina, Colombia y Venezuela recaudan por este concepto 13 pesos de cada 100, 4 más que México; Estados Unidos, Canadá y España 24 pesos de cada 100, 15 pesos mas que México; y el caso extremo es Dinamarca en donde el gobierno recauda 48 pesos de cada 100.
Por si solo, el dato del ingreso no nos dice nada hasta que lo comparamos con el gasto, y en esta materia tampoco estamos bien por que, durante los años del tercer milenio, prácticamente el 85 por ciento se ha destinado a gasto corriente , es decir, se ha utilizado en pago de pensiones, subsidios, sueldos y prestaciones de los funcionarios del gobierno, de los servicios de salud, educación y seguridad publica, así como la compra de bienes y servicios; y solo el 15 por ciento se ha destinado a la compra de bienes muebles, bienes inmuebles e infraestructura como redes hidráulicas, carreteas, entre otros.
Estimado radioescucha, no cabe duda que cuando un gobierno ingresa poco, su gasto será reducido. La solución a este problema es una reforma fiscal con la aplicación de un impuesto plano, o fla-tax como lo llaman los economistas, el cual consiste en una tasa única aplicable tanto a empresas como a trabajadores.
A las empresas de lo que ingresan se les restan sus costos y al remanente se le aplica la tasa única; a los trabajadores, a lo que ganan se le aplica la misma tasa, obviamente a los de menor ingreso no se le cobra impuesto, de hecho se les otorga un subsidio.
Obviamente, este proyecto de reforma fiscal, exitoso en Hong Kong, Estonia, Lituania, Rusia y Singapur entre otros, no será utilizado en México por que el sistema fiscal debe ser complicado para justificar el gasto corriente, o sea, los elevados sueldos de los funcionarios públicos.
Excelente post. El gobierno federal deberá hacer algo de inmediato para sacar al país del "shock financiero" y tendrárn que aumentar los impuestos por más impoular que sea. Lo malo del aumento de impuestos, precios y tarifas del sector público, es que esto afectará a las clases más vulnerables del país.
ResponderEliminar